“El ajo nos aleja del médico”. Ese dicho popular no podría ser más cierto. Numerosas investigaciones avalan las bondades de este superalimento… ¡Y cada vez encuentran más propiedades!
Usado desde la Antigüedad por varias civilizaciones (e incluso recetado por Hipócrates, considerado el padre de la medicina) el ajo es muy bueno para nuestra salud. Los recientes estudios indican que al consumir 4 dientes al día podemos evitar diversas enfermedades.
El ajo, ese alimento milenario
Aunque no conocían sus componentes, los griegos ya usaban el ajo por sus propiedades medicinales.
Pertenece a la familia Allium (al igual que la cebolla y el puerro) y tiene un compuesto llamado alicina que mejora la salud de quienes lo consumenasiduamente y es el encargado de aportarle ese olor tan característico.
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A su vez, nos aporta manganeso, vitaminas B6 y C, selenio y fibra. No tiene demasiadas calorías y sí bastantes proteínas.
Propiedades del ajo
Consumir todos los días varios dientes de ajo te ayudará en las siguientes dimensiones:
Prevenir el mal de Alzheimer
También otras enfermedades degenerativas como la demencia. Este ingrediente de muchos platillos contienen antioxidantes que evitan la acción destructiva de los radicales libres.
Protege el cuerpo de problemas oxidativos y, además, aumenta la cantidad de enzimas “limpiadoras” que purifican la sangre.
Reducir el colesterol
Se recomienda a aquellos con niveles de colesterol “malo” (LDL) elevado que consuman ajo, así como también en las personas con antecedentes cardíacos.
A su vez, puede evitar enfermedades cardiovasculares, derrames cerebrales, infartos y presión arterial elevada.
Combatir enfermedades virales
Gracias al ajo podemos aliviar rápidamente el resfriado o el dolor de garganta. La duración de los síntomas se reduce en un 70%.
Si eres vulnerable a los cambios de clima y te enfermas mucho en invierno no dudes en consumirlo.
Desintoxicar el cuerpo
Los metales pesados que se acumulan en el organismo provenientes de la comida o de la contaminación ambiental pueden ser eliminados al consumir azufre… ¡uno de los componentes del ajo!
Los estudios realizados en empleados de una fábrica de baterías con exposición al plomo revelaron que este alimento disminuía la cantidad del metal en casi un 20%. Esto repercute en menos dolores de cabeza y, en consecuencia, menos faltas por enfermedad.
Mejorar la salud ósea
En el caso de las mujeres en etapa de menopausia el ajo reduce los típicos problemas de debilidad en los huesos. Afectan a la metabolización de estrógenos, lo que podría ser la explicación científica para esta propiedad.
Mejorar el rendimiento
Desde tiempos antiguos el ajo se usa para reducir la fatiga y aumentar las capacidades de los trabajadores. Por ejemplo, los atletas olímpicos de la Grecia Antigua lo consumían antes de las pruebas.
Contribuye al rendimiento deportivo y también mental.
Otros beneficios
Además de lo indicado anteriormente, consumir esta hortaliza sirve para:
- Fluidificar la sangre.
- Prevenir cáncer de estómago, esófago y colon.
- Mejorar la salud articular (por ejemplo, para personas con artritis).
- Descongestionar los pulmones.
- Evitar problemas renales o urinarios.
- Activar el óptimo funcionamiento del hígado.
- Eliminar el estreñimiento.
- Desparasitar y eliminar lombrices.
- Equilibrar los niveles de azúcar en sangre.
- Tratar herpes y eccemas.
- Reducir la ansiedad y los nervios.
- Evitar el aumento del ácido úrico que provoca gota y reuma.
- Tratar las várices.
¿Ajo crudo o asado?
Algunos estudios científicos indican que, para aprovechar las bondades de esta hortaliza, es preciso que se consuma directamente del bulbo, es decir, sin ningún tipo de cocción.
Sin embargo, otros estudios afirman que si se cocina de determinada manera se aprovecharán mejor las propiedades.
El ajo tiene varios compuestos. Algunos actúan sin cocinarlo y otros necesitan el calor para “activarse”. Por ejemplo, para prevenir el cáncer se recomienda cocinarlo.
Una técnica que evita la pérdida de nutrientes al asarlo es primero picarlo y dejarlo reposar 45 minutos. En ese tiempo la alicina se activa y ya no se destruye aunque se cocine. De esta manera es lo mismo comerlo crudo o cocido.
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Consume 4 dientes de ajo y serás más atractivo
Según una investigación de la Universidad escocesa de Stirling, las mujeres consideran más atractivos a los hombres que comen ajo. ¿Cómo es eso? Todo tiene que ver con los aromas expulsados por la piel.
Para llevar a cabo el estudio se dividió a hombres voluntarios en tres grupos: el primero consumió ajo crudo, el segundo cápsulas de ajo y el tercero nada.
Después de hacer deporte pidieron a todos que secaran la transpiración con una toalla. Un conjunto de mujeres eran las encargadas de indicar el atractivo, la masculinidad y la simpatía de los hombres a través de su sudor.
Según los resultados, aquellos que habían comido ajo crudo tenían un olor más agradable, masculino y atractivo. Los componentes se desprenden de las axilas y eso tiene un efecto positivo en las relaciones íntimas.
La acción antibacteriana del ajo permite que las axilas desprendan un aroma más dulce al reducir la cantidad de microorganismos que causan el típico mal olor, sobre todo al hacer deporte.
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