¿Tu hijo se muerde las uñas? Puede ser el indicio de estos problemas...

Que los niños se muerdan o coman las uñas es uno de los llamados hábitos nerviosos más comunes y podría deberse a una gran cantidad de causas. Sin embargo, esto no debería llevarte a restarle importancia, dado que es uno de los malos hábitos infantiles que con mayor frecuencia se llevan hasta la vida adulta con nefastas consecuencias.

Pero además de lo mala que sea en sí misma esta costumbre, también podría ser unaseñal evidente de ciertos problemas no tan claros para el ojo de padres o del maestro inexperto. Veamos cuáles son y si se trata de solo una mala costumbre o de un trastorno emocional.

Ansiedad

Lamentablemente, la ansiedad no es un patrimonio exclusivo de la vida adulta. El temor a los exámenes, el disgusto por una mudanza o un viaje o la llegada de un hermano sonsituaciones que pueden llevar a un niño a temer por su futuro. ¡Y de ese temor a la ansiedad y a morderse las uñas hay un solo paso!

Sin embargo, no hay que obsesionarse, pues hay que distinguir entre la onicofagia(nombre científico de morderse las uñas) como un hábito constante o el comerse las uñasocasionalmente ante ciertas situaciones traumáticas como un cambio de escuela o al sentir vergüenza cuando llegan visitas.

ISTOCKPHOTO/THINKSTOCK

Aburrimiento

Por el contrario, muchos niños se muerden las uñas porque no encuentran nada mejor que hacer en ese momento. Esto ocurren en particular en los niños de edad pre escolar y se soluciona distrayendo al niño con algo interesante: un vídeo, una canción o compartir juntos la preparación de la comida pueden bastar.

Necesidad de descargar tensiones

No menos importante que las dos anteriores, esta posible causa de onicofagia en los niños debe ser tenida muy en cuenta, no solo por los daños en los dedos sino porque muestra que hay algo dentro del niño que está reprimido y no quiere (o no puede) dejar salir.

La onicofagia por tensión es la cara visible de cierta energía reprimida en su interior, es decir, es una manera de que el niño pueda descargar la tensión interna que ciertos hechos le producen, desde un compañero que lo hostiga (bullying) a un viaje de pie en un micro lleno todos los días e, incluso, el abuso sexual podrían ser los disparadores de este tipo de onicofagia.

Por eso, la tensión no es un tema menor. Por supuesto, muchos niños que toman el hábito de morderse las uñas lo dejan después de algunas semanas. Sin embargo, si persiste es necesario consultar con un profesional para evitar problemas dentarios, en los dedos y en su estado de ánimo a largo plazo.