CÓMO COMBATIR EL MAL ALIENTO

El mal aliento se produce debido a las bacterias que frecuentan en nuestra boca y eliminan las proteínas que consumimos.

Es así que se generan compuestos que incluyen en su contenido azufre con malos olores. También es posible que el mal aliento se origine debido a las infecciones que algunas personas padecen en las vías respiratorias por resfriados, faringitis o sinusitis.

1- CEPILLADO E HILO DENTAL VARIAS VECES AL DÍA

La placa que se acumula en los dientes recoge las bacterias causantes del mal aliento. Si cepillas tus dientes al menos dos veces al día y luego usas, hilo dental y enjuague bucal, verás como logras resultados y logras controlar el mal aliento.

2- RASPAR LA LENGUA.

Este sencillo gesto—cada vez que te lavas los dientes— es muy útil para prevenir el mal aliento. La lengua es un medio ideal para las bacterias, solo tienes que raspar suavemente con tu cepillo de dientes.

3- CUIDADO CON CIERTOS ALIMENTOS

Que aún siendo saludables causan mal olor al comerlos como el ajo o la cebolla. Un buen truco para controlar el mal aliento si no puedes lavarte los dientes, por ejemplo si estás fuera de casa. Un poco de agua para enjuagar un par de veces y chicle sin azúcar de sabor menta o hierbabuena. Los chicles los puedes llevar a mano en cualquier lugar y te pueden ser útiles.

4- EVITA TENER LA BOCA SECA

Ya que entonces es más fácil que aparezca el mal olor. Bebe agua de forma frecuente ya que ayuda a deshacerse de la acumulación de bacterias que se acumulan en la boca.

5-MASTICA HIERBAS

Un fantástico remedio es masticar hojitas de hierbabuena, o salvia, o perejil o albahaca.Estas hierbas dejarán un olor fresco en tu aliento.

6- MASTICAR CORTEZA DE NARANJA O LIMÓN

Otro remedio fácil que ayuda a controlar el mal aliento, puedes hacerlo después de lavarte los dientes en cada comida o entre horas.

¿POR QUÉ SE PRODUCE EL MAL ALIENTO?

La mayoría de las veces el mal aliento se produce en la boca, las distintas partículas de la comida se quedan entre los diente, esto fomenta la aparición de bacterias que causan el mal olor. Fumar y una inadecuada higiene dental contribuyen al mal aliento.

En ocasiones una persona se lava los dientes cuida su higiene bucal pero tiene mal aliento. Esto sucede porque hay enfermedades de las encías, úlceras en la boca que puede favorecer el mal aliento. Además determinadas infecciones de la nariz o la garganta también contribuyen al mal aliento.